¿Me pone una Coca-cola?


La verdad es que jamás me imaginé que pudiera llegar a algún sitio remoto y encontrarme un cartel de Coca-cola. No sólo eso sino que nos fuimos al lugar más alejado de Etiopía y seguíamos encontrándonos el anuncio de Coca-cola, era como si nos persiguiera, parecía que el tío de la coca-cola nos sacaba varios días de ventaja e iba pintando los anuncios por los sitios en los que luego íbamos a pasar. No había excepción: en las casas, en vallas, en postes y así yendo por un paisaje donde no hay vegetación y lo único que te encuentras son piedras y más piedras, allí está, como si nada, te tienes que frotar los ojos, porque no te lo puedes creer, pero si, allí está, el inesperado anuncio de Coca-cola pintado sobre una piedra.

¿Qué le deben pagar al hombre que pinta los carteles de la Coca-cola para que haya llegado hasta ese extremo?



O eso o es de psiquiatra, porque con 47 grados, mira que es de masoquista ponerte en medio del desierto a pintar un anuncio de Coca-cola, está claro que en este mundo tiene que haber gente para todo.

Aunque durante todo el camino te has ido preparando viendo los anuncios, te imaginas que debieron ser pintados hace mucho tiempo y que ni de broma en pleno desierto te puedes encontrar una Coca cola fría, pues estás equivocado! El conductor del camión de Coca-cola esta tan loco como tú para cruzar las zonas desérticas y llegar a donde nosotros vivimos.


Lo que no es de extrañar es que cuando llega se formen innumerables colas en la Piazza para reponer los cascos vacios por el líquido preciado, y lo más increíble de todo es que es una Coca-cola de verdad y además con 300cl! y no 200cl cómo te venden en España, y todo por 23 céntimos de euro, realmente Coca-cola debe ganar mucho dinero en España.


El problema viene cuando pides una botella de agua embotellada y tienes que pagar por ella 60 céntimos de euro por una botella de litro y medio, casi 3 veces más! En una zona donde la temperatura no baja de cuarenta-cuarenta y cinco grados durante el día, la verdad es que es increíble la diferencia de precios. Poniéndonos serios ya, la dificultad de encontrar agua en estas zonas hace que esta se cotice de esta manera, eso unido a la inflación existente en Etiopía, y la falta de lluvias hace que la situación sea un poco más complicada que tiempo atrás.


El coste de los alimentos se ha disparado por las nubes, multiplicándose en ocasiones hasta por cuatro lo que hace que actualmente un kilo de arroz o de pasta sea más barato en España que en Etiopía y eso que el cambio es 1-15, es increíble. Por esta razón, por la falta de lluvia, pérdida de cosechas, se está complicando la situación nuevamente en Etiopía. ¿Qué pasará a finales de este año? De todo, mientras que el precio de la Coca-cola sea más barato que el agua, de todo.


¿Tendremos que ducharnos a este paso con Coca-cola?

No hay comentarios: