Siempre imaginé que dejaríamos en España toda nuestra vida social ya que uno no se imagina que aquí tuviera igual o más vida social que en la otra parte del Mundo. Ayer por la noche recibimos dos mails de la Embajada, uno para un espectáculo de flamenco con cocktail para el día 3 (que bien se lo pasan en Addis) y otro para la celebración del día nacional el 12 con comida para todos los españoles residentes. Así que no esta mal, sobre todo para volver a recordar sabores, aunque después del otro día los tengo recientes.
Claro que esto es para el futuro, porque hoy hemos tenido la inauguración de la Casa que las Hermanas de la Caridad de Madre Teresa que tienen en Semera, al lado de casa. Todo ha empezado muy pronto para nosotros. Eso de levantarse a las 5.30 para preparar la salida es un poco duro, pero bueno, la intención era intentar llegar puntuales pero ni por esas. Ni haciendo rally hemos llegado pronto, aunque sólo llegamos tarde por 11 minutos, todo un record. Así que ducha, ropa limpia, cerrar la casa y nos hemos ido todos, Mohamed, Ababa, Hamadu, Rubén, María y yo a la misa que celebraba el Obispo de Addis Abeba en casa de las Hermanas.
La inauguración empezó con una misa en una mini carpa que se ha montado. El 99,999% de la población son musulmanes y con las dos manos puedes contar todos los cristianos de la zona, aunque para la ocasión había venido gente de las otras casas. Después, la colocación de la primera piedra de un pequeño hospital que las sisters van a construir al lado del compound. Nunca había asistido a una cosa así y ha sido muy interesante.
Después de los actos religiosos, el culinario: desayuno comunitario. Pan, mantequilla y mermelada de las líneas aéreas, gracias a todas ellas por los donativos, plumpy nut (complejo nutricional de 500 kcal.), la típica mantequilla de cacahuete pero a lo bestia y con vitaminas, té buenísimo con canela, café para otros, leche, azúcar y demás.
Y así terminamos la mañana, pero luego la tarde estaba reservada para el “drama”, una especie de teatro a lo etíope, a partir de las 6.30 que ya los musulmanes han terminado sus oraciones y más ahora que estamos en el ramadán. La representación fue un éxito entre los asistentes que aplaudían cada escena.
Finalizado el drama, hubo “circo”: actuaciones con escaleras, pelotas, cajas, fuego y sombreros, etc. Un verdadero espectaculo. La actuación que más aplausos recibió fue la del fuego, escupían fuego y hacían malabares con teas ardiendo, con las luces apagadas -aquí anochece a las 7- lo que dada mayor espectacularidad a la actuación. Una pequeña biografía de Madre Teresa y cena para todos! Es en estos casos cuando te das cuenta de porqué las celebraciones van unidas habitualmente a la comida y más aún en Etiopía. Ha sido la primera vez que me he tomado una “mirinda” en casa de las Hermanas.
Terminado el día, hemos hecho de taxi a Dupti, así que hemos traído a la gente que vive en nuestra ciudad y a la cama, pues ya ha cundido el día.
Claro que esto es para el futuro, porque hoy hemos tenido la inauguración de la Casa que las Hermanas de la Caridad de Madre Teresa que tienen en Semera, al lado de casa. Todo ha empezado muy pronto para nosotros. Eso de levantarse a las 5.30 para preparar la salida es un poco duro, pero bueno, la intención era intentar llegar puntuales pero ni por esas. Ni haciendo rally hemos llegado pronto, aunque sólo llegamos tarde por 11 minutos, todo un record. Así que ducha, ropa limpia, cerrar la casa y nos hemos ido todos, Mohamed, Ababa, Hamadu, Rubén, María y yo a la misa que celebraba el Obispo de Addis Abeba en casa de las Hermanas.
La inauguración empezó con una misa en una mini carpa que se ha montado. El 99,999% de la población son musulmanes y con las dos manos puedes contar todos los cristianos de la zona, aunque para la ocasión había venido gente de las otras casas. Después, la colocación de la primera piedra de un pequeño hospital que las sisters van a construir al lado del compound. Nunca había asistido a una cosa así y ha sido muy interesante.
Después de los actos religiosos, el culinario: desayuno comunitario. Pan, mantequilla y mermelada de las líneas aéreas, gracias a todas ellas por los donativos, plumpy nut (complejo nutricional de 500 kcal.), la típica mantequilla de cacahuete pero a lo bestia y con vitaminas, té buenísimo con canela, café para otros, leche, azúcar y demás.
Y así terminamos la mañana, pero luego la tarde estaba reservada para el “drama”, una especie de teatro a lo etíope, a partir de las 6.30 que ya los musulmanes han terminado sus oraciones y más ahora que estamos en el ramadán. La representación fue un éxito entre los asistentes que aplaudían cada escena.
Finalizado el drama, hubo “circo”: actuaciones con escaleras, pelotas, cajas, fuego y sombreros, etc. Un verdadero espectaculo. La actuación que más aplausos recibió fue la del fuego, escupían fuego y hacían malabares con teas ardiendo, con las luces apagadas -aquí anochece a las 7- lo que dada mayor espectacularidad a la actuación. Una pequeña biografía de Madre Teresa y cena para todos! Es en estos casos cuando te das cuenta de porqué las celebraciones van unidas habitualmente a la comida y más aún en Etiopía. Ha sido la primera vez que me he tomado una “mirinda” en casa de las Hermanas.
Terminado el día, hemos hecho de taxi a Dupti, así que hemos traído a la gente que vive en nuestra ciudad y a la cama, pues ya ha cundido el día.
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